sábado, 7 de enero de 2012

Cuarto trasero de Reyes


Nota previa: surgido al calor de un relato verídico de Víctor Balcells, cuyo enlace teneis aquí Puede resultar largo y aburrido, pero me ha gustado escribirlo, hacía dos años que no me esforzaba de verdad.Leer mientras se escuha esta canción: 


6 de Enero 2015. 22.58h

Avanzo entre restos de Reyes. Las cajas de colores se amontonan en las calles, impidiendo el paso de vehículos. Plásticos rígidos y transparentes como ventanas a un mundo oscuro de cartón desnudo, marrón, sin la tersura y dibujos que se ofrecen en el envoltorio exterior. Prostíbulos infantiles, de algún modo. Vacíos, ya no tienen juguetes, sin juguetes para siempre, juguetes que ahora pueblan los vertederos hasta que nos han poblado los vertederos a nosotros. Los vertederos fueron la respuesta a ciudades dormitorio que crecían de forma centrífuga. Los vertederos nos invadieron.

7 de Julio 2014. 15.37h

Llegué cinco meses antes al Baix Llobregat en una misión médica especial. Gracias a una profecía, en 2012 nos enteramos de un posible aumento de las enfermedades raras en la zona. La profecía la realizó la gran Rosanna en una audiencia privada con el President. El President, hombre versado en artes oscuras, había sustituído algunos Consellers por eminentes astrólogos de madrugada televisiva. La Generalitat, al borde de la quiebra acuciada por las deudas, nos propuso a un pequeño grupo científico-técnico el análisis de la zona y la búsqueda de soluciones al problema.

En un coche de lunas tintadas con el objetivo de camuflarnos entre los pobladores, recorrimos todas las carreteras entre Castelldefels y Olesa de Montserrat. Puerta por puerta hicimos encuestas. Entramos a escondidas en centros de salud y hospitales. Indagamos en tertulias de bares. En círculos de barrio. Asociaciones de vecinos y grupos de teatro amateur. Allí no pasaba nada, al menos nada que tuviese que ver con enfermedades raras.

Así que cuando llegamos no existía el problema, y ese fue nuestro problema. No existe el problema, dijo una voz. Lo sabemos, dijo otra voz, pero eso es problemático. ¿Quién de entre nosotros podía decirle al President, regidor de nuestros destinos, que su astróloga se había equivocado por completo? Primero nos jugamos a suertes quién sería el portavoz de esa fatídica entrevista. Luego decidimos que no podíamos hacer esto. Los tres meses de carretera nos habían unido igual que astronautas en una cápsula de camino a Marte, sabiendo que nunca regresarán a sus casas. Por ello nos habíamos dividido en parejas.

9 de Septiembre 2014. 04:56h

El piso franco está en silencio. Hemos follado hasta quedar exhaustos. No hay agua corriente, huele mal. No debimos haber follado. Odio este silencio, pero a ti no te odio. Quizá te empiezo a odiar. Quizá no nos hemos quedado exhaustos sino dormidos. Quizá no fue buena idea dividirnos en parejas. Quizá pude haber elegido mejor. Quizá este silencio me incomoda. Quizá no son horas para pensar. Quizá he debido quererte, o dejar de hacerlo. El sofá cama está vacío, seguimos estando solos. Dónde están los demás. Por qué hace tanto frío. Pero espera, respira, déjame calmarme, vuelvo a escucharte dormir. Suenan gotas en el grifo. Hay agua corriente, huele menos mal. Sigue siendo verano. Odio este silencio, pero a ti te odio menos.

21 de Julio 2014. 11.23h

Acabamos de salir de la audiencia con el President. Sus ojos brillaban. Rosanna se sentaba a su lado, el pelo rubio platino y los labios tatuados para nunca pintarselos. Sonrisa de satisfacción, seguramente estuviera húmeda. Habíamos redactado un guión, y, en perfecto orden de intervención, le relatamos al President cómo Rosanna había acertado de pleno y en el Baix Llobregat los niños se retorcían de melancolomas, tumores de ideal tristeza que no les permitían disfrutar de la estival luz del sol. Una enfermedad inventada, pero rara, sin duda. ¿Y qué podemos hacer? preguntó el acongojado President sin hacer ninguna clase de mención a intervenir sobre la causa, evitandonos más mentiras. Complejos polivitamínicos en sus juguetes, respondimos. De este modo tenemos 6 meses para actuar y evitaremos alarmas sociales, pues como comprenderá, Mosén President, esto tiene que quedar dentro de la más estricta confidencialidad. La puerta del despacho se cierra detrás de nosotros. Sillas por el suelo, sexo tántrico al calor del Zodíaco. Ganamos todos.

13 de Octubre 2014 13.58h

Visitamos la Fábrica de Juguetes. Tiene máquinas que hacen ruidos de máquinas y personas que hacen ruidos de máquinas. Hay juguetes que hacen ruidos de personas. La Fábrica de Juguetes la dominan los asalariados. Todos ellos usan el mínimo interprofesional. Llevan pan a sus casas, y desde el próximo día de Reyes, complejos vitamínicos a todos los niños del Baix Llobregat. Es posible que haya errores de cálculo y los juguetes vitaminizados se esparzan por más zonas. No hay peligro, los niños crecerán altos, fuertes, robustos. Los hombres del siglo XXI, los que harán una Tercera y Cuarta Guerra Mundial. Hay un dulce olor a vitaminas en el aire, ojalá tuviera hijos para que recibieran uno de estos juguetes. Los plásticos son brillantes, las cajas llaman poderosamente la atención. Cómo van a disfrutar. Se hará buen márquetin. Romperemos techos de venta. La economía y la salud de una nación recuperadas gracias a una astróloga farsante y a unos embusteros. Esta noche me haré la paja con la izquierda.

20 de Noviembre 2014 16.11h

Vemos telediarios para pasar el rato. La Generalitat nos mantiene con una pensión en estos meses. Hasta conocerse el éxito de nuestra misión, debemos permanecer ocultos. Nuestros parientes tienen noticias de una misión humanitaria en Malabo, eso les hace felices. Nosotros ya dejamos crecer nuestras barbas y vemos telediarios para pasar el rato. Hace más frío en este piso de San Vicenç según va pasando el otoño. Ya hemos follado todos con todos. Ya no tenemos nada que hacer, si al menos supiéramos que vamos a llegar a Marte los días parecerían más ingrávidos. Vemos telediarios esperando el del mediodía de Reyes. En ese las cámaras nos mostrarán a niños sanos, lozanos, llenos de vida, como ya sabemos que lo están ahora. Las cámaras mostrarán felicidad, ¿no es eso lo que querían? Prevendremos los terremotos y las hordas no tendrán que tomar las calles. Precios módicos para los juguetes. Superior a 30 euros, no incluye pilas. Canciones infantiles con voces infantiles en los anuncios que se intercalan entre las series de dibujos animados infantiles. Éxito garantizado.

9 de Diciembre 2014 15.40

Se termina el puente. No hemos visto la nieve ni la luz del Sol. Hemos discutido. Discutido sobre por qué mentimos aquel día. Discutido sobre por qué escuchamos a una astróloga. Discutido sobre por qué nos vendimos. Discutido sobre las parejas que hicimos, y luego rompimos y luego mezclamos. Discutido sobre todo lo que era pasado y no se podía arreglar. No estamos enfadados, no tenemos fuerzas para estarlo. Necesitamos algo que nos recupere, y ya ni el sexo ni los telediarios lo consiguen.


9 de Diciembre 2014 0.15h

La folie à quatre de esta noche no ha satisfecho a nadie. Nos hemos ido al sofá, a la cocina, al baño y a una habitación, respectivamente. En el baño había un complejo vitamínico de los que tomamos como muestra el día de la Fábrica. Una voz ha dicho que se lo iba a tomar. Voy a tomármelo, así dijo la voz. Luego, la masacre. Yo escuché ruido desde el salón. Es la guerra. Un ente amorfo y azul donde antes hubo una persona. Hemos tenido que matarlo.

Las vitaminas no funcionan, las vitaminas provocarán las enfermedades raras en el Baix Llobregat. Rosanna ha acertado. Su profecía se ha cumplido gracias a nosotros. Nos ha usado, nos conocía, sabía lo que ibamos a hacer. Rosanna usa al President. Rosanna gobierna en la sombra. Derrotados, ¿quién nos creerá? ¿Qué podemos hacer, salvo evitar la inevitable toma de vitaminas? Nos encerramos en el piso. En el lado bueno, ahora tengo dos mujeres para mí. Ese es también el lado malo.

25 de Diciembre 2014 21.02h

El Telediario abre con el éxito de la venta de juguetes de una Fábrica de Juguetes concreta en Sant Just Desvern. Hablan de la calidad del producto, el excelente servicio de márquetin, la genial acogida del público, la felicidad en las casas y en el gobierno. Es el indicativo de nuestro fracaso más absoluto, de la hecatombe cercana a una fiesta de muertos vivientes.

Me he echado a llorar. Ellas ya no se acercan a mí desde la semana pasada porque no quiero ver nada ni nadie, las amenazo con tomarme las vitaminas si me tocan. No quiero saber, no quiero pensar en todos los niños azules que van a vagar por las calles dentro de dos semanas. No quiero saber nada de cementerios ni vertederos ni burdeles ni cartones, aunque sólo sean de tabaco.

1 de Enero 2015 12.34h

¿Qué hacer? ¿Qué hacer? ¿Qué hacer? ¿Qué hacer? Descartadas las escopetas, la resistencia pasiva, las acampadas en las tiendas, los encadenamientos en las farolas, el vocerío en periódicos y radios locales, las protestas en páginas web. No hay nada que hacer, no hay nada que hacer, no hay nada que hacer, no hay nada que hacer. Lo repito como un mantra durante los siguientes cinco días. Mis compañeras han abandonado ya el piso y han vuelto con sus familias para celebrar el Año Nuevo. Han dicho que contarán que volvieron porque en Malabo hacía frío a pesar de estar en el Trópico, y que se mudarán antes de que los niños nos invadan. Me han dejado un Christmas de Unicef y buenos deseos para el año que empieza. No me guardan rencor. Ojalá les vaya bien puedan mudarse.

6 de Enero 2015 22.55h

Ya los oigo desde el salón. Madrugaron. Abrieron las cajas que en la Fábrica vi cerradas. En cada piso de cada edificio había al menos uno. De Collbató a Gavà. Miles, quizá millones de niños. Se transformaron de una forma convulsa, violenta, casi epiléptica, al contacto con los juguetes. Los padres no quisieron ver a sus hijos. Salieron a las calles, llenaron los contenedores de juguetes y envoltorios. Verde, amarillo, azul. Hemos vencido al reciclaje, dirán cuando no quepa más basura organizada y entonces haya que desparramar los residuos por las calles.

Primero fue el campo. Luego vinieron las urbanizaciones. Luego los vertederos de residuos sólidos urbanos. Crecimos hacia afuera hasta alcanzar el límite de las ciudades, y ahora lo de fuera crece hacia adentro. Las cajas de juguetes y los niños mutantes nos invaden despacio. Tras el Baix Llobregat caerá la Zona Franca. Cornellà. Luego la ciudad retrocederá sobre sí misma y me volverán a interesar los telediarios. No levanto las persianas para que no entre luz ni gritos.

En la televisión es ahora el antiguo President el que posa al lado de Rosanna, que ostenta el Título de Sibila Mayor del Reino y anuncia a todo aquel que quiera oírla que, del mismo modo que ella predijo la catástrofe, ella tiene la solución. Habla de un equipo científico que lleva trabajando meses en la zona. Salen sus fotos en la televisión y no somos nosotros, son los vecinos de enfrente.

Decidido, bajo a la calle con un bote de polivitaminas en la mano. Avanzo entre restos de Reyes. Las cajas de colores se amontonan en las calles, impidiendo el paso de vehículos. La culpa es toda nuestra. Nosotros dejamos que las Sibilas y las mentiras nos gobernasen. Nosotros construimos todos los restos que ahora nos invaden desde los vertederos hacia dentro. Nosotros hicimos a esos niños que ahora repudiamos. Ahora que ya no podemos hacer nada, me tomaré esas vitaminas y seré como ellos.

1 comentario:

Victor Balcells Matas dijo...

Fantástico, me he reído en la justa medida -lo del president y rossana es muy bueno-, pero por respeto al tono fúnebre y a mis amistades del baix Llobregat (ella lo pronunciaba así: "Baii Iobregá", muy élfico), contengo la risa; pero un gran cuento -sobre todo teniendo en cuenta que lo has escrito en un día. ¿Acaso un posible inicio de novela? El president tiene muchas cosas que decir, y un zamorano es precisamente el punto de vista exterior y científico que necesita Catalunya en este tiempo de penuria y f.c. barcelona.