martes, 29 de marzo de 2011

El Bar "Los Amigos"


I.

Nos reunimos en el bar Los Amigos para ultimar los detalles del golpe. Los viejos nos miraban. Llevábamos el pasamontañas calado hasta las cejas, gafas de sol y guantes para no dejar huellas en los vasos sucios en los que nos sirvieron las cinco cañas que pedimos. Desplegamos el mapa encima de la mesa: atacaremos aquí, aquí y aquí. Ellos vendrán por aquí, aquí y aquí. Tendremos tres coches y cinco ametralladoras. ¿Cinco? Mejor siete. Si somos sólo cinco. Pues cinco. A las diecinueve treinta nos reuniremos en el punto marcado. Abortaremos misión sin respirar si uno solo falta a la cita. Nuestros chips microorgánicos desentonaban con la decrepitud del bar Los Amigos. Allí la pared se desconchaba y la humedad del solar colindante había combado las baldosas. Nadie en el bar Los Amigos despegaba la vista de la televisión ni el diario Marca. Les daba lo mismo a cuántos charlies fueramos a matar. Sus mujeres les esperaban en casa para que llegaran tarde oliendo a vino, con el cocido caliente. Sus chaquetas de punto estaban en el polo opuesto a nuestros chalecos de teflón y cazadoras de goretex antideslizante de última generación. Revisamos las armas, engrasamos los muelles, recontamos las balas. Nos miramos y apuramos el trago. Todo iba bien hasta que nos fuimos sin pagar.

II.

En cada ciudad del mundo hay un bar Los Amigos. Cada bar Los Amigos es igual al anterior, de modo que hay una especie de franquicia internacional. Les Amis, The Friends. Da igual. Son todos los bares el mismo. Para fundar un bar Los Amigos necesitas al menos una condición: una sociedad de dos amigos. No importa lo demás: dónde o cómo o por qué se conocieron, desde cuándo, qué les une. Sólo hace falta que sean dos y quieran mantener un bar que se caiga, un bar donde sirvan chatos de vino como producto estrella. Además, deben garantizar un mínimo de dos mayores de 65 años sea cual sea la hora del día entre la apertura, a las 10.30 am y el cierre, a las 9.45 pm. Son atributos voluntarios, pero que mejoran el ambiente: a) una o dos mesas con partida entre las 15.45 pm y las 18.30 pm b)la prensa local y si es la deportiva, que sea nacional c)puede prescindirse del bote de propinas, pues tal emolumento es inexistente en un bar Los Amigos. Si por azares del destino sucediera que los propietarios discutiesen, es decir, que se rompa la amistad que da nombre al bar, lo más recomendable es en primer lugar que se intente solucionar el conflicto por todos los medios, y si no, que se sustituya al elemento discordante por otro tranquilizador.

III.

Queríamos que Tony y Samu se reconciliasen y no se nos ocurría cómo. Hasta que Mariola pasó por delante del bar Los Amigos y nos dio la idea. Citarlos por separado y a ciegas en una mesa del bar, para que se quedasen frente a frente y entonces no tuvieran más remedio que arreglar sus diferencias. A Tony le dijimos que quedaríamos en Los Amigos para repartirnos el trabajo de mecánica cuántica y a Samu lo convocamos con la excusa de ver el partido de vuelta de semifinales de la Copa del Rey. Nos jugamos a suertes entre el grupo una plaza para permanecer con ellos, pues no nos fiábamos de que si estaban cara a cara se fueran directamente a liar a golpes o a darse la vuelta sin cruzar palabra. Le tocó a Susana. Susana se arregló: maquillaje, botas de tacón, pelo suelto. Nadie le advirtió de todo lo que iba a desentonar en el bar Los Amigos.

IV.

Un muerto y cuatro heridos en una reyerta
Salamanca/ Agencias.

Un hombre resultó muerto y otras cuatro personas heridas tras una disputa en el bar "Los Amigos" en Salamanca capital. Los hechos tuvieron lugar sobre las siete de la tarde cuando dos hombres encapuchados que salían del local dispararon a quemarropa indiscriminadamente contra todos los clientes del bar, que en aquel momento eran cuatro jubilados, cinco jóvenes y la dueña del negocio. Testigos presenciales afirman que los encapuchados estaban guardando material en una mochila cuando dos de los jóvenes se han puesto a discutir acaloradamente. Los encapuchados presuntamente han tratado de mediar en la discusión hasta que han tenido que recurrir al uso de la fuerza debido a la violencia verbal y física que estaban empleando los jóvenes. Los nervios acabaron de perderse cuando la dueña ha amenazado con llamar a la Policía para poner paz. Fue entonces cuando comenzaron los disparos. El fallecido, J.M.P.G, jugaba al tute en una mesa apartada con otros cuatro ancianos cuando, molesto por el elevado tono de las voces y por haber perdido una jugada de veinte en bastos, profirió un "cagüendiós" que acabó por encender los ánimos. Los encapuchados dispararon indiscriminadamente contra los clientes, dandose después a la fuga. Cuando los agentes del orden llegaron ya no había nada que hacer, salvo separar a dos de los jóvenes, que seguían peleando. Ambos pasaron a disposición policial y han sido puestos en libertad con cargos esta misma mañana. Se busca a los encapuchados en la zona y [...]

viernes, 25 de marzo de 2011

El puto Nole


El puto Nole es un crack. El genio nunca llegado del 25-M. Un hombre que ha tenido sus manos empapadas hasta este jueves, pero que lo que sin duda ha sudado es la camiseta. Es un genio y un payaso. El personaje sobre la pista, al que todos temen porque saben de lo que es capaz, pero al que su mente y personalidad histriónica le juegan tan malas pasadas que a veces incluso se camufla entre la multitud, no se deja ver, es uno más. Y entonces es cuando el puto Nole os pule a todos, cuando sale de entre la gente con su sonrisa máxima. Es capaz de hacer que te rías de él hasta quedarte sin aire, y en ses momento es cuando te da la puntilla. Es capaz de llevar sobre sus espaldas el circo con cuatro frases, gestos y coreografías, pero también de dar el máximo bajo presión, cuando la ocasión lo requiere. Cuando a los demás les temblaría el pulso y la muñéca. Porque el puto Nole es un genio que se esconde detrás de un payaso, como ya os decía, eso es lo que lo hace peligroso. Lo he visto crecer, lo he visto de todas las formas y colores posibles. Triunfando pero también losseando. A la sombra de otros más grandes, pero también tapandole el sol a otros muchos.

Al puto Nole también lo he oído hacerse llamar Francisco, pero yo y unos cuantos más sabemos que no es así, que en realidad él es el número 2 del mundo. Y si no es el número 1 es porque siempre queda algo que mejorar. Felices 20, pollo.

viernes, 4 de marzo de 2011

- ¿Qué quieres para estas navidades?
- Conservar la piel.

Robert de Niro a Jean Réno. Ronin (1998)


jueves, 3 de marzo de 2011

He perdido mi palestino

Un trozo de paño nos produce placer
y un grano de arena nos da dolor.
(Rafael Arnáiz)

8 años después, he perdido mi palestino blanco y negro. De bares, cómo no. A cambio me he encontrado un jersey de esos que podría ponerse Guardiola. No me queda mal, o eso dicen. Pero yo echo de menos mi palestino.

Me lo trajeron del Líbano. Olía a zoco, olía a especias árabes y a historias que en aquel entonces me parecían de las Mil y Una Noches. Con 14 años mi madre me echó una increíble bronca por sacarlo de casa, por ponermelo. Te van a partir la cara cualquier día, me decía. Me lo ponía con más miedo que vergüenza. Era diferente, era especial. Era mi protesta adolescente. ¿Contra qué? Ni idea. Contra algún sistema, supongo. Luego vinieron los tiempos en que Bershka y Mango comercializaron productos parecidos, y entonces ya sí que a nadie nunca pareció importarle una mierda.

Después vino la Universidad. Pez en océano, qué más da. Yo llevé siempre mi palestino. Con traje o con cazadora vaquera. No era una forma de romper con ningún estilo. Me abrigaba, me sentía cómodo, era casi una parte de mi. Mil y una noches de nuevo, pero de otro estilo diferente a las de Oriente. Ahora estará en el cuello de alguien por ahí, que espero que lo conserve, que lo trate bien. Alguien para el que represente algo de aquí a otros ocho años. Que viaje con él, como hice yo.

Viajó conmigo a París, Londres, Lisboa, Oporto, Estambul, Praga, Viena, Budapest. A Madrid, Jerez, a Galicia, a Ponferrada, a Barcelona. Lo veo en muchas de mis fotos. Y ahora sucede que lo echo de menos, sucede que es una estupidez pero no quiero sustituirlo por ningún otro si no viene del Líbano, si no es blanco y negro con ese mismo bordado.

Qué cosas más extrañas estas del cariño, puedes llegar a echar de menos un trozo de tela.