miércoles, 30 de abril de 2008
Santiago
Seamos sinceros, el baloncesto se me escapa al entendimiento; cuanto menos no llego a pillar todo lo que ocurre sobre la pista. Podeis preguntarme cualquier cosa sobre Formula 1, futbol o motociclismo [en articulos posteriores de "Mi amado sillon ball" me referire] y no fallare ni una. Pero de basket, no me saqueis de los titulares habituales de NBA, ACB y LF2. No me hagais hablar de juego en perimetro, de defensa en zona, de 3,05 y de 6,25. Mi intencion ante todo es hablar de lo humano, no de lo divino; de la opinion y no de la objetividad [que tantas veces se me escapa, que se nos escapa a todos]
Siempre me suelo quedar fuera de los buenos momentos. Solo estuve dentro en Jerez 2007 [todo fuera por oir aullar la Yamaha M1 del Doctor] pero la verdad es que me quede a las puertas de Castellon [25-6-2006], fuera del Camp Nou [enero de 2007], fuera de La Seu d'Urgell [abril 2007], fuera del Toralin y del Amilivia [primavera 2008], me quede fuera de mi sueño de Formula1 en pequeño con el Kaiser [7-12-2007], y la vez que estaba dentro me tiran al hierro y ni siquiera puede que opte al rebote. No creo que pase el tren a Santiago [16:49 estacion de Zamora, 21:20 estacion de Santiago], y no creo que tenga opcion de ir al pabellon Santa Isabel, a sufrir con el equipo. Todo lo cerca que estare es un disco compacto con 17 canciones.
Da igual, siempre queda la ilusion. ¿Sabeis? Creo que es la ilusion ese pequeño veneno. Mas que un veneno, pienso que es algo asi como una droga [ahora que ya voy cogiendo experiencia en el tema] algo que te da buenos y malos ratos. Pero que como tu cerebro elimina lo malo y se queda con esos momentos agradables, la ilusion te sigue gustando, y sigues queriendo mas, y mejor. Las desilusiones son momentos que pueden durar uno o mil segundos, que no se te olvidan durante ese tiempo, que te dan un sabor amargo en el paladar y vacio en el estomago. Preguntaoslo cada vez que veais a la Roja quedarse en cuartos. Cada vez que Alonso aparca en el cesped que rodea la pista. Cada vez que Lorenzo o Pedrosa besan el suelo luchando por el liderato de una carrera. Cada vez que veais un balon naranja rebotar en el tablero, y acariciar la red, e irse al parquet de nuevo, pensadlo...
El sillon ball, mas alla de un despreocupado pasatiempo, es una sofisticada tortura si te lo sabes tomar con la suficiente pasion. Y mas alla, creo que esta frase es aplicable a cualquier cosa de esta vida.
Tomaosla con pasion. A veces lo pasas mal. Pero es divertido.
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