domingo, 4 de julio de 2010

Por culpa de Salinas nos fuimos del Mundial


No queremos Fanta, ni queremos Coca Cola;
queremos lo que toma Diego Armando Maradona.
(Popular, Anónimo)



El doble pivote es una mentira. Una de tantas. Como que si el fútbol africano tuviera más rigor táctico ganarían títulos, porque físico les sobra con tanta pierna. El doble pivote es un invento comercial para vender espinilleras, para vender camisetas ajustadas de la selección italiana, de marca Puma. Roberto Baggio no era un 9 ni era un 10. Era un 9 y medio. Aquello sí que era catennaccio. Patapúm p'arriba y un abrazo. Te esperan atrás y te matan a la contra. Una contra de libro. Trazada con tiralíneas. Tranquilo, Luis Enrique, hemos vengado tu tabique. No pudimos hacer nada con lo de Amunike, por otra parte.

Aunque pocas selecciones han merecido más un Mundial que la Hungría del 54. Aquello sí que era fútbol. Esos hombres mimaban el balón, no corrían por correr. Porque fútbol es fútbol y el fútbol es así, todo de seguido. Esto no acaba hasta que no pita el árbitro, 90 minuti en el Bernabeu son molto longo, sobre todo si el espíritu de Juanito nos ronda las orejas. Cómo iría Juanito, para no ver el camión. Ya lo decía su coetáneo Michel. Le faltó un regate, o le sobró un regate. Las bicicletas son para el verano, hombre. Cualquier momento es un buen momento para marcar, pero ahora sería un gran momento.

Es innegable la evidente implicación actual de la mujer en el fútbol. Moderno. Odio eterno al fútbol moderno. Los goles son la salsa de este deporte, entonces por qué 6 de 10 de las noticias más leidas en la edición digital del diario Marca son cachondas. Muchos de vosotros habreis podido apreciar a Larissa Riquelme. O el increíble y desenfrenado ascenso del body painting. Media España cantó por los campos en la liga del 95 que por culpa de Salinas nos fuimos del Mundial. La otra media España se manifestará a las puertas de Telecinco para exigir el despido inmediato de Sara Carbonero. Que se besen, hombre, que se besen. Los enemigos del hombre son tres. El diablo, el mundo, la mujer. Que llevado a Sudáfrica podrían ser Maradona, Carbonero y los goles fantasma anulados por el trencilla.

El trencilla. Hoy tú de negro, mañana tu familia. Gafas, cabrón. Rafa, me cago en mi madre. Penalti y expulsión del número 5. Fuera de juego de tres hombres y siete metros, lo han visto noventa mil almas, menos tú. Ya nos estais robando. Siempre con los de blanco, en caso de duda, no se pita, y si se pita es tarjeta naranja. Eso es tarjeta, jeta, jete. Siempre en contra del equipo pequeño, cómo se os ve el plumero. Días tristes tras la instauración del Villarato. Aquí hay mano negra. Y además cuentan con la complicidad de Blatter. Mira que sois australopitecos, si hasta en el tenis han instalado el ojo de halcón.

Llegados a este punto, es menester no olvidar que el fútbol es 11 contra 11 y siempre gana Alemania. Nos tienen ganas, lo sabemos. Son como un Panzer. Serios, ordenados, no se ríen. Al contrario que Brasil, que juegan como viven: entrenan en el playa. Esa alegría que ahora le falta a los europeos. Ese chavalito, oyeme lo que te digo, va a ser una revelación. Aunque este Kaká no es el Kaká del Madrid. El Mundial del 98 lo perdieron por el síncope de Ronaldo. Como nosotros el del 2002, por el bote de colonia de Cañizares.

Qué injusto es el fútbol, hay una deuda histórica con este equipo. Pero poniendolo de extremo derecho no vamos a ningún lado. No tiene sangre en el cuerpo. Parece mentira, no se dan cuenta de que juegan con la ilusión de un pueblo. Y de un país. Písale la cabeza, la cabeza písale. Cuando la pelotita no quiere entrar, no entra. Y no puedes hacer nada con este delantero en estado de gracia. Te la lía en una baldosa. Menos millones y más cojones. Si es que al final acabamos como todos los años. Jugamos como nunca, perdemos como siempre. Cualquiera puede llegar ahí, lo difícil es mantenerse. Qué frescura tiene este niño, es un puñal por la banda. De aquí a dos partidos ya le tienen tomada la matrícula.

Todos llevamos un seleccionador dentro. Qué fácil es hablar, sal tú ahí a correr. No tiene la rosca de Beckham. Desde que Zidane se retiró, no ha habido un heredero claro de su clase. Por eso se hunde el fútbol francés. Si es que parece que cuánto mejores somos nosotros... Nos toman por portugueses. Esa selección es un soplo de aire fresco al juego rancio que se está viendo. Cómo les gusta especular con el resultado, yo eliminaba tanto centrocampismo. Pero con extremos, que de portería a portería es guarrería. No hay rival pequeño. Jugando así no ganamos ni a las chapas. Pero no ves que está libre al otro lado. Corre, hombre, corre. Noooo, pasala. Noooo, tira. Si es que no teneis ni idea.

Ojalá luego no tengamos que acordarnos de esa jugada. No estamos viendo la mejor versión de este hombre. Pero ya os subireis todos al carro cuando marque el gol decisivo en el minuto 89. Ya nos estais robando, cabrones. Si es que esto se veía venir. Bueno, venga, para casa, otra vez será. Ojalá todas las desgracias sean como esto. Ahora, que yo a estos los ponía a picar piedra y...

1 comentario:

Unknown dijo...

Jjajajajajajajajajajajajja.

Qué gran post Jaio.

Se te olvidó la gran frase de Camacho en la semifinal de la Eurocopa; "Si el fútbol es darle".

;)Felíz Verano.